Gobierno de Chile busca solución a largo plazo para renovables, no rescate inmediato
El Gobierno de Chile se resiste a las solicitudes de un salvavidas inmediato para los productores de energía renovable que sufrieron pérdidas después de que un auge de la inversión se enfriara. No obstante, ofrecerá una solución a más largo plazo.
El Gobierno está preparando un proyecto de ley que tiene por objetivo corregir el mercado de contratos de energía en materia de rentas por congestión de transmisión, allanando el camino para la próxima fase de la ruta nacional hacia la neutralidad de carbono. Pero no contendrá medidas específicas y en el corto plazo para las empresas de energía renovable que están en dificultades, dijeron las autoridades, que pidieron no ser identificadas dado que aún se está trabajando sobre la propuesta.
Eso podría decepcionar a unidades de la empresa irlandesa Mainstream y la española Acciona SA, que se ven afectadas por distorsiones en un mercado regulado que existe hace 41 años, mientras Chile adecua su red antes de una promesa de neutralidad de carbono para 2050.
Las interrupciones se generan en un país con abundancia de recursos solares y eólicos, por los cuales Chile ha liderado en la clasificación BloombergNEF de los mercados emergentes más atractivos para inversiones en energías renovables.
Un sistema complicado de determinación de pagos —concebido décadas antes del auge de las energías renovables— significa que los generadores solares y eólicos en el desierto del norte de Chile a veces no reciben nada por su producción. Eso se ve agravado por deficiencias en la transmisión y un flujo de pagos directos para mantener los costosos generadores de carbón y diésel en operación en caso de que se tenga que acudir a ellos rápidamente.
El Gobierno tiene la esperanza de que las inversiones en transmisión y almacenamiento finalmente alivien la crisis. Pero el sector de la energía renovable, que ha invertido unos US$5.000 millones en los últimos siete años, advierte que eso podría demorar demasiado y que el fracaso de los proyectos significaría un golpe a la credibilidad de Chile.
Dos firmas —María Elena Solar SA e Ibereólica Cabo Los Leones II SA— ya dijeron que no podrán seguir cumpliendo los contratos. Este mes, Moody’s rebajó la calificación de ILAP, un generador eólico respaldado por BTG Pactual.
“Es urgente implementar medidas de corto plazo que permitan la sostenibilidad financiera de las empresas renovables a las cuales hoy se les paga cero por la energía que producen”, dijo Ana Lía Rojas, presidenta de la asociación de energías renovables Acera. “No hay ninguna empresa que puede sobrevivir vendiendo su producto a precio cero”.
Generadoras de Chile, un grupo que representa a los principales productores de energía del país, no solo a las plantas de energías renovables, presiona por una amplia modernización del mercado en lugar de medidas específicas a corto plazo.
Fuente: Bloomberg