[vc_row][vc_column][tm_heading style=”thick-separator” tag=”h5″ custom_google_font=”” text=”Gobierno acelera diseño de propuesta para recorte de emisiones con miras a la COP25″ font_size=”lg:32″][vc_column_text]

La Moneda está definiendo su nuevo compromiso de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI). Documento será presentado en la COP25, pero la propuesta final solo se conocerá en marzo de 2020.

En septiembre de 2015, el Consejo de Ministros de la Sustentabilidad del gobierno de Michelle Bachelet definió la primera Contribución Nacional Determinada (NDC, siglas en inglés) de Chile, documento clave en la lucha contra el cambio climático y el principal sustento del Acuerdo de París, pues contiene los compromisos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) de cada país.

La NDC provocó una dura pulseada política entre los ministros Rodrigo Valdés (Hacienda) y Pablo Badenier (Medio Ambiente). El primero cuestionó el sustento técnico de la propuesta del segundo, enfrascándose, según testigos, ‘en una pelea interna’. El conflicto incidió en el resultado. La propuesta inicial, por ejemplo, contemplaba la reforestación de 100 mil hectáreas de bosque nativo, pero Hacienda agregó la palabra ‘preferentemente’, para incluir plantaciones como el pino y eucaliptus. La anécdota refleja lo complejo de las NDC. En esta primera versión, Chile se comprometió a reducir sus emisiones en un 30% respecto al año 2007, para el año 2030.

El país, tras suscribirse al Acuerdo de París, debe actualizar sus NDC y aumentar su ambición de reducción de emisiones. Nada obliga a un país a presentar su NDC antes de la COP26 de Glasgow, pero el gobierno de Sebastián Piñera decidió presentar la suya en la COP25, en su estrategia por posicionarse como uno de los líderes mundiales del cambio climático. La nueva propuesta primero será sometida a consulta pública, y luego a una rápida revisión del Consejo de Ministros para la Sustentabilidad.

La consulta ciudadana debía partir en septiembre, pero se retrasó. La apuesta del gobierno es llegar con los anuncios a la COP25 y la entrega definitiva antes de marzo de 2020. Y aunque lo que se presentará en la COP25 no es el documento formal, si será el anuncio político de cuánto será la intención de Chile de rebaja de sus emisiones. El gobierno lleva más de un año trabajando en ella, con cientos de reuniones con expertos, privados y sociedad civil y que será definida por el Consejo de Ministros de la Sustentabilidad. Una de las decisiones que debe tomar el gobierno es si, para la actualización de su NDC, aplica las guías acordadas en la COP24 de Katowice, llamada ‘libro de reglas’, principios mínimos para todas las NDC, pero que se empezarán a aplicar por obligación recién para el siguiente compromiso, en 2025.

El documento, eso sí, ‘recomienda encarecidamente’ hacerlo ahora. Las reglas establecen, por ejemplo, especificar cómo cada país calculó su meta. La meta de reducción de emisiones que está considerando el Ministerio de Medio Ambiente es una denominada ‘acumulada’. Esto significa que se traza una proyección de emisiones de hoy a 2030, que considera un año peak de aumento, seguido de una baja constante y progresiva (ver infografía).

El detalle técnico, incluyendo el cálculo del año peak de emisiones, ya están listos, pero será decisión del gobierno comunicarlos o no. Será decisión de la ministra Carolina Schmidt, primero, y luego del Consejo de Ministros y el Presidente Piñera, si la NDC chilena considere las reglas de Katowice. Ricardo Bosshard, director ejecutivo de WWF Chile, apela al cierre anticipado de las plantas de carbón para lograr una reducción ambiciosa.

‘No es difícil adelantar el cierre de las termoeléctricas’, asegura. Según Climate Analytics, si Chile quiere ayudar a cumplir la meta de que la temperatura del planeta no suba más de 1,5 °C, debe cerrar sus termoeléctricas en 2032, no en 2040. Los modelos que se manejan en el gobierno apuntan a que la medida será clave en alcanzar la meta de carbono neutralidad.

Pero aún se trabaja en el detalle, pues las emisiones cero suponen una gran masa de bosques que absorban el carbono. Y ello es un conflicto latente entre científicos, ONG y la industria forestal. Si bien desde Hacienda son partidarios de una meta dependiente al PIB, van a pesar dos factores en la discusión interna: la Sofofa y actores privados le han dicho al gobierno que prefieren una meta de reducción específica que entregue certeza, y el rol de Felipe Larraín, presidiendo la Coalición de Ministros de Hacienda por el cambio climático, lo que lo posiciona junto a Piñera y Schmidt, como líderes en la materia.

Fuente: La Tercera[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][tm_spacer size=”lg:30″][/vc_column][/vc_row]