[vc_row][vc_column][tm_heading style=”thick-separator” tag=”h5″ custom_google_font=”” google_fonts=”font_family:Poppins%3A300%2Cregular%2C500%2C600%2C700|font_style:300%20light%20regular%3A300%3Anormal” text=”Gigante chino adelanta crecimiento de la generación solar residencial en Chile” font_size=”lg:32″][vc_column_text]

Se trata de Trina Solar, el segundo fabricante de módulos solares más grande del mundo.

Durante el último año se vio en Chile un explosivo crecimiento del desarrollo de proyectos de energía renovable, principalmente de plantas solares, donde uno de los protagonistas fue la empresa de origen chino Trina Solar, el segundo fabricante de módulos solares a nivel global, y responsable del 20% del mercado local.

El vicepresidente para Latinoamérica y el Caribe de la compañía, Álvaro García-Maltrás, adelanta que las proyecciones apuntan a que la energía solar a nivel mundial va a seguir creciendo fuertemente en los próximos años, y que lo visto en la última década no es un caso excepcional, sino que aún resta un largo camino, en el que Chile jugará un importante rol para el crecimiento de Trina Solar.

‘Nuestros planes son duplicar nuestra capacidad de producción respecto a 2021 e incrementar nuestra presencia en líneas de negocios complementarias a este tipo de energía, como es el desarrollo y construcción de proyectos solares, la fabricación y comercialización de soluciones de almacenamiento; y es que vemos una solución muy atractiva en la combinación de la energía solar y el almacenamiento’, explica el ejecutivo.

—¿Cómo están viendo el mercado chileno?

‘Estamos presentes desde 2013, y siempre ha sido uno de los principales mercados de la compañía. Nuestra previsión sobre el mercado solar en Chile es que estará en torno a los 2,5 GW, la mayoría en grandes proyectos o en PMGD (Pequeño Medio de Generación Distribuida con excedentes de hasta 9MW) y nosotros tenemos diferentes actividades, la más importante es la comercialización de módulos solares, y estimamos una cuota de mercado de un 20%. Otra línea de negocio son los trackers, seguidores solares, y en la parte de desarrollo de proyectos también estamos creciendo, y este año queremos construir unos 100 MW’.

—¿Qué importancia tiene Chile en la región?

‘Chile es el segundo mercado más grande de América Latina después de Brasil; antes México era el principal mercado, pero con la nueva administración ha caído mucho. Dos tercios del mercado latinoamericano ocurren en Brasil, pero claramente la segunda posición la tiene Chile, y lo bueno es que un mercado relativamente estable ha mantenido un crecimiento sostenible en los últimos 10 años, lo que anima y da recorrido a las inversiones, por lo que merece la pena esforzarse allá, porque no será una apuesta de 2-3 años’.

—Pero el país ha estado exento de dificultades, ¿no les preocupa que exista inestabilidad?

‘Es innegable que una estabilidad política ayuda a un desarrollo más rápido de nuestro negocio; lo que ocurre es que las ventajas de la energía solar son tan evidentes, sumando la grandísima competitividad que ha alcanzado esta tecnología estos últimos años, que ya no depende tanto de gobiernos que la promocionen’.

—¿Cuáles son los planes en Chile para este año?

‘En 2022 nos vamos a enfocar en PMGD y grandes plantas, porque creemos que es lo que va a tirar del mercado, y para ello vamos a utilizar nuestros módulos de mayor potencia, porque encajan perfectamente en este tipo de soluciones, además de nuestra tecnología de seguimiento, para maximizar la generación de las plantas’.

—Estos proyectos, los PMGD, además van a ser claves ante la falta de líneas de transmisión.

‘Este es un mecanismo que tiene fecha de caducidad, por lo que el impacto ya está evaluado y considerado; lo que estamos viendo es qué viene después, y creemos que posiblemente venga un mercado de dos segmentos, grandes plantas que seguirán construyéndose e integrando soluciones de almacenamiento, y por otro lado, se comenzará a desarrollar más activamente el segmento residencial, que llama la atención lo poco desarrollado que está en Chile, en un mercado tan maduro que lleva tanto años implementando energía eléctrica.

‘Es normal que los países comiencen por las grandes plantas, pero generalmente el mercado residencial crece poco después, a la sombra de las utilities. En Chile prácticamente está todo por hacer en el segmento residencial, y es donde las familias y pequeños comercios pueden beneficiarse también, por lo que vemos que todo ese negocio se está por desarrollar, y es completamente distinto a las grandes plantas’.

—¿Es posible que sigan cayendo los precios de esta tecnología?

‘Creemos que se puede conseguir competitividades adicionales, hoy en día el principal componente de una planta solar es el módulo, que representa la mitad de coste total. El módulo que vendemos hoy cuesta un 10% de lo que costaba hace 10 años, y son más eficientes y potentes. Es verdad que el gran recorrido de bajada de precios ya lo hemos logrado, pero sigue quedando recorrido, no tanto en la fabricación de módulos, donde nos estamos enfocando en aumentar las eficiencias, sino en la interacción de todos los componentes’.

—En 2021 hubo contratiempos importantes debido a la falta de insumos para la producción. ¿Dan por superada esa situación?

‘Este fue un tema que nos afectó de lleno, el año pasado hubo un incremento en el costo del módulo aproximadamente de un 40%, solo en un año. Este incremento retrasó la construcción de varios proyectos, nos afectó a casi toda la industria. Esa limitación que había de polisilicio, principal componente de los módulos, se empezó a ver en 2019 y en 2020 varios fabricantes comenzaron a aumentar la producción. Empezaremos a ver los resultados este año, y comenzará a equilibrarse la demanda con la oferta, esperamos que los precios bajen de manera tranquila, no como antes, porque vemos que habrá más capacidad de producción, pero a la vez hay un crecimiento global prácticamente garantizado’.

 

Fuente: El Mercurio[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][tm_spacer size=”lg:30″][/vc_column][/vc_row]