[vc_row][vc_column][tm_heading style=”thick-separator” tag=”h5″ custom_google_font=”” google_fonts=”font_family:Poppins%3A300%2Cregular%2C500%2C600%2C700|font_style:300%20light%20regular%3A300%3Anormal” text=”Estudio revela que 55% de los chilenos está dispuesto a comprar un auto eléctrico” font_size=”lg:32″][vc_column_text]

Así lo señala la encuesta Climate and Public Opinions International Observatory 2019, elaborado en 30 países por EDF en conjunto con Ipsos donde también se indica que un 65% de la población se siente más preocupada por la situación ambiental respecto a cinco años atrás.

Con más de 24 mil personas encuestadas en 30 países, de las cuales 1.000 fueron en Chile, que representan a dos tercios de la población mundial, un estudio elaborado por EDF e Ipsos, reveló la visión de los chilenos en torno al cambio climático y a las energías renovables.

Un punto relevante de la encuesta es que 55% de los chilenos está considerando comprar un auto eléctrico en el futuro.

La muestra también destaca que el 57% de los encuestados piensa que las energías renovables (solar, eólica e hidráulica) son las principales fuentes de energía utilizada actualmente en Chile, cifra que aumenta a 69% si se considera a 2039.

Medio Ambiente

Consultados sobre su percepción de la situación ambiental, un 80% de los encuestados en Chile señaló que esta es «mala» o «muy mala», mientras que en el resto de los países consultados, el promedio es de 54%. Por otra parte, un 65% de las personas en Chile se sienten «mucho más preocupados» que hace cinco años por este tema, cifra que llega a un 37% en el promedio mundial.

La encuesta también muestra que para un 70% de los chilenos es más importante priorizar el medio ambiente que el crecimiento económico, incluso si esto desacelera la economía o genera pérdidas de empleos.

En cuanto a las principales preocupaciones ambientales, la muestra indica que los chilenos lideran en su preocupación por la desertificación y la sequía, con un 49%, versus un 18% en el promedio global. En segundo lugar, se encuentra la inquietud por quedarse sin recursos, seguido por la acumulación de desechos, el cambio climático, y la contaminación del aire y el agua.

Por otra parte, se señala que Chile es uno de los países menos escépticos del mundo en relación al cambio climático, ya que cuatro de cada cinco chilenos reconocen que el cambio climático es de origen humano y 14% no reconoce su vinculación con la actividad humana, mientras que el 4% niega su existencia por completo (frente al 8% en promedio).

Cambio climático
Respecto de las causas del cambio climático, dos tercios de los encuestados en Chile citaron correctamente su principal causa – las emisiones de gases de efecto invernadero – mientras que un 44% citó correctamente la deforestación y el 38% la contaminación del aire.

En cuanto a los responsables, al igual que en la mayoría de los países, los chilenos identifican correctamente a China y los Estados Unidos como los mayores productores de gases de efecto invernadero. Asimismo, sitúan a la industria, la deforestación y el transporte como las actividades más contaminantes, y 3 de cada 4 personas piensan que es el Gobierno el que debe tomar medidas al respecto.

Paralelamente, existen algunos conceptos erróneos en esta materia. Un 85% de los encuestados en Chile consideró que los aerosoles producen CO2, y un 71% que la energía nuclear también lo genera.

Finalmente, un 92% de los chilenos reconoce haber observado los efectos del cambio climático, fenómeno que se repite en la mayoría de los países de América Latina.

Sobre la base de estos resultados, Alejandra Ojeda, gerenta del área de estudios públicos de Ipsos, comenta que la ciudadanía chilena «aún se encuentra en una etapa discursiva, donde el cambio climático se ha visibilizado y empoderado en la agenda, pero que aún no genera grandes cambios conductuales, es decir que el país aun no ha pasado a una etapa de acción sistemática para abordar el problema».

«Para las y los chilenos, el gran actor ausente es la empresa privada. Éstas debieran responsabilizarse de su impacto y liderar programas basados en la sustentabilidad. Ya pasó el tiempo en el que los consumidores valoraban a las empresas exclusivamente por la calidad de sus productos y servicios. El comportamiento moral y el aporte tanto a la comunidad como al medio ambiente, son aspectos que adquieren importancia y conforman la reputación corporativa de cada empresa», concluye la especialista.

Fuente: Revista Electricidad[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][tm_spacer size=”lg:30″][/vc_column][/vc_row]