[vc_row][vc_column][tm_heading style=”thick-separator” tag=”h5″ custom_google_font=”” text=”El rol de la mujer en el sector energético” font_size=”lg:32″][vc_column_text]

La incorporación femenina al rubro va más allá de la igualdad de género. Los expertos plantean que los equipos mixtos aportan un espíritu más colaborativo y esto, a su vez, genera más innovación.

El plan Energía+Mujer, que firmó el Ministerio de Energía, junto a gremios y empresas líderes de la industria energética, ‘apuesta a sumar más mujeres en este sector, pues la evidencia internacional consigna una serie de impactos positivos que genera la diversidad en favor de la competitividad’, dice el ministro de Energía, Juan Carlos Jobet. Dentro de los resultados que la cartera del ramo encargó para conocer la realidad femenina en el sector, y cuyos resultados se dieron a conocer en abril pasado, destaca el hecho de que del 23% de las mujeres que están trabajando en el área energética, 51% lo hace en cargos administrativos.

Estas cifras, para el presidente ejecutivo de Generadoras de Chile, Claudio Seebach, ‘son un reflejo de las barreras y de las brechas tanto sociales como culturales que el país y las empresas del sector energía tienen interiorizadas’. ¿Por qué ellas no siguen, en general, una carrera en cargos directivos, profesionales y operarios? Una explicación está en la distribución geográfica de gran parte de las labores pues ‘la mayoría de los proyectos energéticos está ubicada lejos de las grandes ciudades y se requiere trabajar en turnos o viajar semanalmente’, explica Inés Rodríguez, gerenta de División Ingeniería y Tecnología de Robert Half.

En esa línea, Sara Smok, country manager de ManpowerGroup Chile, añade que existe el prejuicio de que las mujeres no van a poder con los horarios porque tienen otras obligaciones que cumplir, aludiendo al cuidado de los hijos, y agrega que ‘el rol tradicional es cómodo y seguro para muchos y van a hacer lo necesario para eternizarlo, de espaldas a todos los cambios sociales que están ocurriendo a gran velocidad’.

Los beneficios

Pero la incorporación de la mujer al sector no sólo tiene que ver con igualdad de género, sino también con los beneficios económicos que eso conlleva. Si las mujeres participaran en la economía a la par que los hombres, ‘el ingreso de Chile sería entre 15% a 20% mayor, y el Producto Interno Bruto (PIB) aumentaría en promedio 0,65% por cada 100 mil mujeres que ingresaran a la fuerza laboral, según datos de la Comisión Nacional de Productividad’, acota Seebach. Al interior de las compañías, las mujeres aportan con otra mirada para afrontar los desafíos laborales.

‘Los equipos mixtos adquieren una dinámica y una fuerza que impulsa una mejor comunicación, un mayor ordenamiento y planificación, un espíritu más colaborativo y se desarrolla también la posibilidad de generar más innovación’, sostiene Smok.

La evidencia ha impulsado que gremios como Generadoras de Chile, participen de iniciativas adicionales a la propuesta por el gobierno, como el programa Win Win, de ONU Mujeres, que fomenta el empoderamiento económico y liderazgo femenino como la base para un crecimiento sostenible, inclusivo y equitativo.

‘Estamos trabajando junto a ONU Mujeres en un ciclo de talleres para nuestras trece empresas socias, a fin de apoyar el trabajo que cada una está haciendo en torno al tema de género y su adhesión al plan público privado Mujer +Energía’, explica Seebach.

Las claves para que ellas participen más en la industria

De acuerdo al diagnóstico sobre la inserción de la mujer en el sector energético que realizó el Ministerio de Energía, sólo el 23% de quienes trabajan en esta industria es mujer y el 10% de los CEO pertenece al género femenino. Fueron algunas de las cifras que impulsaron a la cartera del ramo, junto a gremios y empresas líderes de esta industria, a aumentar la participación de la mujer a través del plan Energía + Mujer, a fin de generar una mayor inserción laboral.

Carlos Finat, director ejecutivo de la Asociación Chilena de Energías Renovables y Almacenamiento (Acera), no tiene dudas de que hay un tema cultural detrás. ‘Desde pequeños nos enseñan los roles (estereotipos) que ‘debemos asumir’ en la vida: las niñas cuidando muñecas y los niños desarrollando grandes construcciones en legos’, dice. Sara Smok, country manager de ManpowerGroup Chile, explica que cambiar esta realidad requiere que en la educación formal ‘tempranamente, y de una vez por todas, se eduque sin discriminación de sexo’.

Fuente: Diario Financiero[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][tm_spacer size=”lg:30″][/vc_column][/vc_row]