Directora Ejecutiva de ACERA: “La agenda propuesta por el Ministerio de Energía debe ofrecer soluciones a los problemas de corto plazo”

Durante su participación en la Primera Cumbre Digital “Descifrando las claves de la transición energética”, evento organizado por el Diario Financiero, la Directora Ejecutiva de ACERA, Ana Lía Rojas, valoró las acciones del Gobierno planteadas en la Agenda Inicial para un segundo tiempo de la transición energética, pero consideró que “estas medidas no están dirigidas a solucionar los graves problemas a corto plazo que enfrenta el sector como son los vertimientos, costos marginales cero y los desacople, que yo creo son el punto más crítico del sistema eléctrico”.

“Aplaudimos que haya una agenda del Gobierno, que, en primera instancia, reconozca que estamos en una crisis que afecta a las energías renovables, que se supone tenemos que sumar a la matriz y no restar, así que esto es una buena señal, tener esta mirada ordenada de medidas que serán un esfuerzo sobre las propuestas que tenemos que trabajar”, destacó Ana Lía Rojas.

En su presentación en el panel de conversación “Nuevos desafíos en el sector eléctrico”, Rojas agregó que “a nosotros también nos gustaría dedicarnos a la mirada de corto plazo, no estar siempre pegados en la coyuntura, pero al revisar esta agenda, pareciera que las propuestas están muy enfocadas en el mediano y largo plazo, porque si bien son medidas de ejecución inmediata como la eliminación de las compensaciones tipo B del impuesto a las emisiones, sus efectos no son a corto plazo”.

En este orden de ideas, la representante de ACERA esbozó las tres grandes áreas en las cuales se debe trabajar en el corto plazo:

1.         Mayor aceleración de medidas y señales para el almacenamiento eléctrico y otros tipos de almacenamiento asociados a ciertas tecnologías de generación.

2.         Otorgar más flexibilidad a la operación del sistema.

3.         Cómo se opera el sector eléctrico, para darle mayor cabida a los automatismos y la forma de inclusión de mecanismos y equipos que permitan una mayor distribución y transferencias en los sistemas eléctricos.

Finalizó agregando que “los grandes desafíos de esta transición energética están en dos ámbitos: en la velocidad de la descarbonización y en la electrificación de los consumos. El consumidor no solo debe tener un suministro seguro, sino también barato y conveniente”.